viernes, 25 de febrero de 2011

1 mes


Despertarme en tu cama, con olor a ti, con olor a algo nuevo, a oportunidades e ilusiones que no se quedan en el aire. Tenerte cinco minutos al día, lo justo para echarte un poco de menos, escuchar como respiras, como te ahogas. No entenderte, no saber lo que quieres y  saberlo. Desesperarte, besarte a escondidas en un ascensor, despedirme de ti sin besos. Que mi pelo roce tu tripa, escuchar música, ver fútbol internacional, comer pasta a media noche, morderte. Y saltar, y que todo estuviese más cerca, y no conformarme solo con soñarte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario